PROCURADOR GAIANO ABRE INVESTIGACION

Y bueno. Ya son dos los que se encaraman al sexto piso. Ahora vendrá la seguidilla año tras año de tan magno acontecimiento. Echeverría – Mamelito, ahora procurador general de la casa, la próxima dupla. En esta vez y a petición de los futuros homenajeados, fiestas independientes.

Y la fiesta en Zhirumo o mas bien las fotos de la reportera grafica Clarita Hervasquez ha dado de que hablar. Ha sido el procurador Gaiano el que ha puesto el dedo en la llaga. La comprometedora foto de Echeverría al lado de una joya arqueológica de la dinastía Uribe Ángel de la que el mismo procurador General niega cualquier vinculo consanguíneo con nuestro presidente a quien el llama el redentor. Dios nos libre dice el procurador insistiendo que se trata de un Uribe de los músicos, poetas y locos, mas no propiamente de los dictadores.

Utilizando una nueva herramienta, casi igualmente desconocida como el C.C. El procurador se valió de un poderoso zoom que solo tienen los computadores Mac para obtener más indicios sobre el sospechoso hallazgo. Gracias a las malas lenguas, a la mala fama y la proximidad en la foto ante el objeto en cuestión, el procurador abrió pliego de cargos contra Echeverría exgerente y exdeudormoroso de Zhiruma en otrora. De inmediato y en el mismo día de la fiesta, Echeverría logro explicar al investigador que si bien la mayor parte del mobiliario provenía de una acertada y anticipada inversión del anticipo en los contratos de obra publica, la jarra en cuestión no se encontraba en el inventario que ya Conavi había hecho pormenorizado de la casa en uno de sus 14 intentos de embargo.

Luego de intenso interrogatorio y ante estas pruebas contundentes, Echeverría salio bien librado, a tal punto que al día siguiente recibió una llamada del mismísimo Uribe Vélez para que le diera la formula que por fin lo librara de su contradictor número uno.

Pero a donde podía dirigirse la investigación. El siguiente sospechoso era casi que evidente. German Enrique el restaurador, presidente de la casa Museo que lleva su nombre y donde además funciona una agencia matrimonial llamada casamenteras Condorita que trabaja en yunta con el párroco de la parroquia in en matrimonios Medellinenses: San Diego. no.

Mientras la casamentera agarraba a las novias de la generación Y, dos de las cuales se pusieron deacuerdo en el color de la chaqueta para cantar con el mismo director de la casa Museo, que utilizo inicialmente la estrategia de zurrunguiar la guitarra para escapara a las pesquisas del procurador.

Como el repertorio del director se limita a las canciones de Quipucamayoc y su hit, quiero un amor contigo, el zurrungueo no duro mucho. Las nuevas generaciones mas rosadas que nunca ya tararean el decadente Arjona, con el mesurado decibel de la ronca de oro Melisita, digna sucesora de la tía Gabriela y la que decía esta frase: “OISTE ALFOOOOOONSO, QUE SERA LO QUE TIENE ESTA LAVADORA”
Fue en una de esas pausas que el procurador logro indagarlo sobre la procedencia de la jarra y de otros objetos que iban apareciendo en esta nueva finca museo. El procurador sospechó que Zhiruma seria un buen lugar para esconder los objetos de valor que por falta de espacio no tendrían lugar en la casa museo de San Diego. Ultimamente para la casa museo parece difícil compartir una planta física con una agencia matrimonial.

Esperamos pues que desde Gaia se nos siga informando sobre el proceso que se abrió sobre apropiación de Jarras, camas y escaparates ajenos y parte del ancestral patrimonio mueble de la familia.

Dorita que además de casamentera, coordina 70 enfermeras regadas por todo Antioquia, reconoció que German Enrique inicialmente intento apropiarse a espaldas de Alfonso de la pieza arqueológica. Pero Dorita, conociendo el riesgo que para la salud publica representa hacer chocolate en jarras de cobre se opuso de inmediato el apropiamiento ilícito y recordó que posiblemente la muerte del finado Uribe se debió a la contaminación del chocolate con un liquidito verde que suelta el cobre.

Desde la Procuraduría de Gaia informo: EL DIRECTOR